Educar en la belleza – Ricardo Piñero

 

 

Lo evidente es lo que sabemos y lo que sabemos nos impide ver lo que hay.

Cuando estamos con nuestros hijos y los ponemos en bloque, no estamos viendo lo que hay.

Estar rodeado de belleza nos viene bien.

Algo que nos llena la vida son las personas.

  1. Tomar distancia (porque podemos generar algo único). ¿Hasta dónde? Nos empeñamos en solucionar problemas que no existen. Ser prudente. Distancia para contemplar el amor. Nos gusta repetir la belleza. Los malos modos no llegan a buenos fines. Educar es como hacer un mapa.
  2. Admiración. La clave está en el sentido de las cosas. La belleza llena de sentido nuestra vida.
  3. Sin prejuicios.
  4. Humildad. Mirada humilde. Conocer quien eres. La belleza nos ayuda a descubrir quienes somos. Nuestra mejor versión.
  5. Verdad. La belleza solo es belleza si es verdad.
  6. Orientar y no desorientar. Hay que fiarse. De la belleza hay que fiarse. En cada cosa buena de la vida está tu oriente. Reconducimos nuestra mirada a la belleza, mirando las cosas pequeñas.
  7. Ir más allá. La belleza a veces es incomprensible.
  8. Discernir. Hay que saber distinguir cosas que no son. Hay que llamar las cosas por su nombre.
  9. Cordialidad. Discernir con el corazón. Querer a alguien sirve siempre para encontrar belleza. La rebeldía de los hijos va en busca de su verdad y de su felicidad.
  10. Evitar la autoexhibición. Evitar la trampa, no podemos deshumanizar, nos falta imaginación.
  11. La libertad. Dulzura. Belleza.